divendres, 21 de juny del 2013

DÍA DE LA MÚSICA


En 1982 comienza a celebrarse en Francia una fiesta que poco a poco va extendiéndose al resto de países europeos: la fiesta de la música. Tres años más tarde esta celebración se instituye como evento europeo y, coincidiendo con el solsticio de verano, en todos los países de la UE se dedica un día entero para celebrar la pasión por la música.

Y es que, al igual que los libros, la música forma parte de nuestras vidas y de nuestro día a día. Hay momentos especiales de nuestra vida que van asociados a una canción en concreto, recuerdos sonoros  que consiguen transportarnos a otros lugares, a otros momentos; ¿quién no vuelve a oler a mar, a sol  y a veranos de infancia a l oir la melodía de "Verano azul"?¿Quién no se emociona al recordar que Susanita, tenía un ratón? y ¿a quién no le levanta el ánimo "cantar bajo la lluvia?

Todos tenemos una banda sonora particular que va marcando los derroteros de la memoria y los caminos del recuerdo. Una melodía que se mete en el cerebro y que ya no hay forma de deshacerse de ella.

Hoy os pongo un trocito de mí. Últimamente le he cogido mucho cariño a esta canción, obviamente por motivos personales, a ver si os gusta...


¿Y a vosotros? ¿Cuáles son las canciones que más recuerdos os traen???

Feliz comienzo de verano... y qué no pare la música!!!!

Un beso

dijous, 6 de juny del 2013

MIS RESEÑAS: LOS PECES NO CIERRAN LOS OJOS

 Hoy os traigo uno de esos maravillosos descubrimientos que llegan a tus manos sin saber exactamente ni cómo, ni dónde, ni por qué, y que tras haberlo leído uno se pregunta "¿dónde habías estado hasta ahora???

 Lo primero que me llamó la atención del libro fue su título: Los peces no cierran los ojos, (bonito, ¿no?) y después una portada de esas que te trasladan a los años de "verano azul", cucuruchos de nata y castillos en la arena.



 Sinopsis:

«Nacer y crecer en Nápoles agota el destino: vaya uno donde vaya, ya lo ha recibido como dote, mitad lastre, mitad salvoconducto.» Un hombre recuerda el verano de sus diez años en un pueblo costero cerca de Nápoles, los años en que se anhela un futuro desde el que sólo se puede mirar atrás. Entre la pesca y los libros, los paseos en solitario y los encuentros con los muchachos del barrio, transcurren sus días, hasta que conoce a una niña sin nombre que le descubre el peso de palabras como amor o justicia.  

A los diez años, la edad se escribe por primera vez con dos cifras. La inquietud y el deseo de crecer son más fuertes que la apariencia física; torpe cascarón el cuerpo infantil. Y permanece intacta la necesidad de protección que cura el calor de las historias familiares, la presencia de una madre y el contacto de la mano amiga.  

Nombrado escritor de la década por el Corriere della Sera, y galardonado con los premios France Culture, Femina Étranger, Laure Bataillon o Petrarca, Erri De Luca es uno de los autores italianos más leídos y admirados en más de veinte países: «El único escritor auténtico que por ahora nos ha dado el siglo XXI», Corriere della Sera. Su última novela, Los peces no cierran los ojos, lo ha encumbrado de nuevo entre los lectores y la crítica: «Un pequeño milagro», L’Unità; «De Luca nos cuenta qué es crecer con la cruda sensibilidad de la que es un gran maestro», Il futurista.

Mis sensaciones:

He de reconocer que mi relación con esta breve novela ha sido de amor a primera vista.




El narrador, desde su vida adulta, recuerda el verano en que cumplió 10 años, una edad señalada: por primera vez, se escribe con dos cifras y aunque él siente que su mente, su alma, en definitiva su vida, está cambiando, su frágil cuerpo parece no acompañarle en este crecimiento.

En una época complicada en la que ser italiano tras la guerra fascista no será fácil, y con unos orígenes de esos que imprimen carácter, ser napolitano, nuestro protagonista tiene una "peculiar" forma de conocer el mundo y a quiene lo habitan: los libros de su padre. A través de ellos entenderá  a quiénes le rodean, pero hay algo que los libros no han conseguido explicarle, una palabra que aparece en la mayoría de novelas que lee y que le parece exagerada, desmedida: AMOR. 

A través de paseos, playa, mar y pesca transcurrirá un verano que marcará su vida.

Las relaciones familiares, la patria, la guerra, la infancia, los miedos y las ansias de conocer y comerse el mundo se mezclan y combinan como ingredientes que convierten esta novela en un plato delicioso.

Uno de los aspectos que me han cautivado es la cuidada expresión que utiliza el autor, plagada de frases y párrafos de esos que te hacen suspirar y de una profundidad asombrosa en tan solo un par de palabras.

Os pongo unos ejemplos que explicarán mejor que yo a lo que me refiero:

¿Cómo describir el rencor de la guerra? 

"Aquel odio que añadía vinagre a las lágrimas"

¿Cómo describir la escritura en pluma sin papel secante? 

"Bajo el aliento ponderado, las letras temblaban relucientes, como lo hacen las lágrimas y las brasas".

¿Cómo describir esas frases de los libros que se clavan en la retina y la memoria?

 "Se topa uno, leyendo, con frases sísmicas"

¿Cómo describir el efecto de los libros? 

"Son la más potente contradicción de los barrotes, los libros. Al prisionero tumbado en el catre le abrían de par en par el techo".

¿Y el amor? ¿Cómo describir el amor? 

" se parece a una marejada de ábrego, revuelve el mar por encima y por debajo lo remueve."


¿Qué, cómo os quedáis??????

Lo dicho, me ha encantado esta novela iniciática que huele a sol y sal, por eso le pongo un 9/10 y seguiré leyendo a Erri de Luca, sin duda.



PRÓXIMA PARADA:
La tienda de los paraguas de Elin Hilderbrand


 ¿Lo habéis leído??? ¿Qué os ha parecido?


POOOOOOR CIEEEEERTOOOOO que me acabo de dar cuenta de que ya casi somos 100 en esta pequeña y humilde familia, así que vaaaaa a ver si animási a alguien más a que se nos una y organizo algo para celebrarlo!!!

UN BESAZO

diumenge, 2 de juny del 2013

MIS RESEÑAS: LUGARES QUE NO SALEN EN LOS MAPAS

A ver si me acuerdo de cómo se hacía esto de reseñar... Últimamente he tenido que dejar un poco de lado este maravilloso mundo bloguero: el exceso de trabajo y las insuficientes 24 horas del día han hecho que me sea prácticamente imposible encontrar algún hueco para conectarme y lo que es aún peor, encontrar un ratito para leer tranquilamente.

Entre preparar y corregir exámenes, leer los relatos presentados al concurso literario del centro donde trabajo, mis clases de francés y varias activivdades más que me han surgido por arte de bilibirloque, he estado realmente ocupada, pero aquí estoy de nuevo, a ver si puedo recuperar el tiempo perdido y pornerme un poco al día con vuestras últimas reseñas.

Debido a todo este cúmulo de tareas, no he podido disfrutar como me hubiera gustado de la novela que hoy os traigo: LUGARES QUE NO SALEN EN LOS MAPAS, de Berta Noy.


 Sinopsis:

Nada indicaba a Claudia que ese día iba ser diferente al resto pero cuando por la mañana abrió el periódico observó horrorizada la peor noticia que podía haber recibido. La esquela de Eliott anuncia el fin de una relación apasionada y real pero clandestina. Tenía que ser justo ahora cuando quizá podrían tener una vida común.
Poco después en el funeral de quien hasta ese momento había sido su amante, Claudia rememora como se conocieron veinte años atrás y como a pesar de la diferencia de edad se dejaron arrastrar por una pasión sin límites. La historia no terminó bien y cada uno terminó siguiendo su camino  pero el destino quiso reunirlos veinte años después a pesar de que cada uno había rehecho su vida.

Mi opinión:

Claudia, una mañana recibe una noticia que tambaleará los cimientos de su propia existencia: Eliott Kerr, el afamado pianista, ha muerto.
A sus 42 años y tras un reencuentro con su primer amor, veinte años mayor que ella, Claudia está convencida de que la vida le brinda una nueva oportunidad. Todo parece de ensueño, una novela de esas románticas que hacen suspirar a pesar de que Claudia está casada y tiene una hija, hasta que una mañana, al abrir un periódico, lee la noticia de la muerte de su amante. Perdida, como un barco a la deriva, Claudia iniciará un recorrido hacia su pasado en el que irá compartiendo con el lector su vida, descubriéndonos poco a poco su orígenes, su familia, su trabajo, a la par que sus miedos, sus experiencias, sus inseguridades, y sobre todo su historia de amor.

Hija de una figura del jazz de fama mundial, Claudia acude a clases de piano con un profesor que le han recomendado a su padre y de quien se enamorará irremediablemente. Solo hay un problema, bueno en realidad dos: él es 20 años mayor que ella y además está casado. Pero nada de esto conseguirá poner diques a esta historia de amor y entrega que nos lleva a recordar hasta donde es capaz de alargarse las sombras del primer amor.

Lo cierto es que, como he dicho anteriormente, no he podido leer tranaquilamente esta novela y la he tenido que dejar aparacada varias veces, lo que me ha impedido degustarla con la tranquilidad que requiere. También es cierto que soy poco dada al almíbar excesivo y aunque el final no sea precisamente feliz, hay algunos momentos de la historia que me chirrían un poquito, no sé, me parece que en la vida real el amor está cercado por mil y una circunstancias más, sobre todo cuando ese amor repercute en otros, que poco o nada han tenido que ver en esa historia y que se convierten en "daños colaterales".

También es cierto, que para ser la opera prima de esta autora, la narración es fluida y sencilla aun cuando se pierde por los recovecos de la memoria y el recuerdo.
Aún así la novela me ha gustado así que, por eso le pongo un 6'5/10.

PRÓXIMA PARADA: 
LOS PECES NO CIERRAN LOS OJOS de Luca de Erri


Perdón por el tiempo ausente, y espero que no os hayáis olvidado de mí...