dijous, 17 de maig del 2012

La lucha del profesor

Ayer comenzaron los 6 días de huelga que los sindicatos de profesores han convocado para este final de curso, y allí que nos fuimos a Valencia, a luchar por nuestros derechos.
Soy consciente de que una gran mayoría opina que no vamos a conseguir nada y que a una gran parte de la sociedad le parece estupendo y maravilloso que por fin, a los profesores y maestros nos metan "en vereda" porque mira que quejarnos con nuestro horario, nuestro suledo y nuestras vacaciones... no tenemos perdón!!!!

Ese es realmente el gran escollo con el que se encuentra la educación en estos días: la soledad. Ignorados en clase, sin respaldo de los padres y juzgados por la sociedad, y así desde luego poco vamos a hacer.
Poca gente es realmente consciente del hecho de que por nuestras manos pasa el futuro, el de todos, y si a estas alturas alguien sigue pensando que nos movemos simplemente por el sueldo o porque no haya calefacción en las aulas, es que realmente no se ha enterado todavía de que va la historia.

Los recortes implantados por la pésima administración tienen un final claro: el fracaso de decenas de generaciones que perderán el derecho a una educación de calidad y digna. ¿Y qué tendrán que ver las churras con las merinas, os preguntaréis? 
Os pongo un ejemplo: este año tengo un curso formado por 18 alumnos de entre los cuales hay 4 niveles educativos diferentes, y eso ¿qué quiere decir? pues que además del nivel propio de la clase (un 2º de la ESO), hay unos alumnos que tienen ACI, es decir que tienen un nivel inferior y a los que hay que prepararles material específico que siga los mismos contenidos pero adaptados a sus necesidades y capacidades. Además hay un alumno que tiene un nivel de 4º de primaria y otro de 3º de primaria, de los que obviamente también hay ques estar pendientes y cerciorarse de que trabajen.
Y por si esto no fuera suficiente están los que acaban de llegar y desconocen el idioma y los que necesitan refuerzos especiales. Bien, pues con las nuevas medidas, en lugar de 18 podría tener hasta 35, con la misma diversidad, y sin clases ni de refuerzo, ni de adaptación...¿resultado? que si tu hijo tiene algún tipo de dificultad, olvídate de que se le vaya a atender de una forma específica o adecuada, porque no habrán medios para ello.

Cuando viene un alumno preocupado por los problemas de su casa y hay que hacer de psicólogo y amigo, cuando un alumno te dice que no ha almorzado porque no había nada en su casa y le das tu alumerzo; cuando haces de padre e intentas animar a un alumno para que no se rinda y siga luchando o cuando te dan las 12 o la 1 de la madrugada corrigiendo exámenes, redacciones, preparando trabajos... cuando haces de guardia jurado en clase para mantener el orden o se te encoge el alma cuando conoces de cerca los problemas y sufrimientos de niños que a esa edad solo debería pensar en jugar, esas son labores que quedan escondidas, las que ayudan a crecer como personas y por las que no se podría pagar.

En los barracones, desde luego ya no hará falta calefacción, porque estarán hacinados y reza para que el profesor de tu hijo (sobre todo si está en algún curso clave como 2Bachillerato) no se ponga enfermo, porque tampoco se cubrirán bajas inferiores a 15 o 20 días.
Y todo eso para que aún así, y después de una ardua vida estudiantil, te quedes sin poder ir a la universidad porque han subido las tasas, de forma que muchas familias con escasos recursos no tendrán más remedio que enviar a sus hijos a trabajar, ¡¡¡¡¡ a no calla, que tampoco hay trabajo!!!!!

A mí estos días hay una duda que me ronda por la cabeza, ¿en los libros de historia del futuro, explicarán qué era la Educación Pública?¿quién les explicará que era más importante que Alonso corriera por Valencia que construir un colegio decente? Los padres van a tener que inventarse otra cantinela, porque la de "hijo mío estudia, que eso es lo más importante. Estudia y así tendrás un buen trabajo" está totalmente desfasada y ridiculizada.

Pero pese a todo, ayer durante la manifestación que tuvo lugar en Valencia encontré ya la justificación definitiva para esta huelga (y para todo el dinero que nos van a quitar por ella). Al pasar por delante del IES Luis Vives, un alumno, asomado a una de las ventanas sostenía un cartel: "Gracias", y con eso, a mí, me basta.


Por TUS hijos, MIS alumnos, NUESTRO futuro.
 

divendres, 11 de maig del 2012

MIS RESEÑAS: EL FRÍO MODIFICA LA TRAYECTORIA DE LOS PECES

A ver..., no es que el libro no me ha haya gustado...quizá, simplemente, no es mi estilo.


Es una novela corta (156 páginas), en las que se da una imagen optimista de la vida, de la familia y del amor a través de los ojos de un niño.
En capítulos muy breves, se nos va describiendo la vida de una serie de familias y personas de un barrio, cada cual más peculiar, durante una tormenta de hielo en Canadá. Esta tormenta, hará que la vida de los protagonistas cambie.

¿Cuál es, pues el problema? Pues, y esto es como siempre en mi humilde opinión, de pronto todo se vuelve MARAVILLOSO y todos, absolutamente todos acaban felicísimos y con un atracón de perdices que, a mí, personalmente, me empalaga.
Bien es cierto, que en estos tiempos que corren, se agradecen las buenas noticias y aquellos relatos que nos recuerdan que la vida puede ser en rosa, y no siempre en un gris mate mortecino, pero taaaaaaaaan rosa y taaaaaaaaaaan dulce a mí me provoca ataque de caries.

Aún así he de reconcer que la novela está bien escrita, con una prosa fluida, que junto a los brevísimos capítulos hace que sea lea muy rápidamente. Gana al estar puesta en boca de un niño, que cuando sus padres le cuentan que han decidido separarse, le pide al cielo que le ayude, y así, empieza la tormenta.

¿Recomendable? solo en cuadros agudos de pesimismo y deseperación.


PRÓXIMA PARADA:  Caligrafía de los sueños




 
A ver si con este hay más suerte ...

diumenge, 6 de maig del 2012

MIS RESEÑAS: CAFÉ BABILONIA

Encontré este libro por pura casualidad, buscando libros que me pudieran interesar me topé con este Café Babilonia, y no sé exactamente por qué me llamó la atención el título (un criterio muy profesional para seleccionar un libro...jejejejj) y he de reconocer que ha sido una maravillosa sorpresa.

En el Café Babilonia, entre ollas, pucheros, canela y cardamomo descubrimos la historia de Marjan, Bahar y Layla, tres hermanas iranís que se ven obligadas a huir de su país tras el estallido de la revolución.

Las tres hermanas llegan a un pueblo de Irlanda, Ballinacroagh, después de haber estado una temporada en Londres tras huir de su Teherán natal, y alquilan un café. Y a través de este argumento tan sencillo la autora logra trasladarte a todo un mundo de olores y sabores que despiertan los sentidos, y es que el Café Babilonia no solo se lee, sino que se huele, se saborea, se ve. No es solo una novela, es un recetario de cocina (en cada capítulo hay una receta persa), un tratado sobre las especies y sus cualidades, sobre los miedos arraigados...
Son estos guisos y sobre todo el poder de los olores y sabores de las especies, las que van reviviendo los recuerdos de las hermanas y gracias a los cuales vamos descubriendo su historia. 

Este mar de recuerdos y vivencias se van entremezclando con la nueva vida que encuentran en este pueblecito irlandés, donde descubrirán el valor de cosas como el amor, la amistad o la seguridad en uno mismo.

Con personajes sencillos pero bien delineados, un coro de habitantes que revolotean alreddor de ellas facilmente identificables y una mezcla entre la ilusión de lo nuevo y el miedo de lo dejado atrás, de lo conocido y lo nuevo, la autora Marsha Mehran consigue envolverte. La esencia me recuerda a la película Chocolat.

Creo que es obvio que me ha encantado, que me ha cautivado su sencillez, y creo que la mejor reseña que puedo hacer es decir, que Cafe Babilonia, sabe a canela.


PRÓXIMA PARADA: