Cuando en la anterior reseña dije que iba a leer La librería ambulante de Christopher Morley, me dijeron que no me iba a arrepentir, y estaban en lo cierto.
Escrita en 1917 en los EE.UU., no había sido publicada hasta ahora en nuestro país a pesar de que fue un éxito de ventas en su país.
Es una novela, diferente, sencilla, pero no por ello menos cautivadora.
Helen y Andrew McHill son dos hermanos que viven en una granja. Mientras Andrew descubre el mundo de la literatura y decide escribir sobre las bondades de la vida rural, tranquila del campo, Helen debe quedarse en la granja, trabajando el doble, esforzándose por cuidar la casa, cocinar, ocuparse de las gallinas, los animales, etc. Andrew se convierte en un escritor de éxito, y el trabajo se amontona para Helen, hasta que un cachivache estrafalario cambiará su vida, el Parnaso.
Roger Mifflin, dueño de esta peculiar librería ambulante, aparece un buen día para vendérsela a Andrew, la sorpresa vendrá cuadno sea Helen quien la compre, ansiando su propia aventura. Cierto es que en un principio Helen la comprará para evitar que hermano desaparezca y la deje sola al frente de la granja, pero nada más lejos de la realidad: el Parnaso se convertirá en el elemento de maduración y cambio de Helen, abriéndole los ojos a una nueva forma de entender y sentir la vida.
A partir de este momento compartimos con ella los caminos y sobre todo las reflexiones sobre la vida y los libros al mismo tiempo que asistimos a una historia de amor.
Para mí la única pega es que sea tan corto, apenas un centenar de páginas que te dejan con la miel en los labios. Esa brevedad es la que hace que se narre en un estilo sencillo, sin demasiadas metáforas rebuscadas, ni largas descripciones.
Tiene pasajes veraderamente preciosos, y para muestra un par de botones:
"He mezclado tantas lecturas a lo largo de mi vida que mi mente está llena de ecos y voces de hombre mejores que yo".
"Creo que leer un buen libro te hace modesto. Cuando uno logra ver con lucidez el interior de la naturaleza humana, cosa que te proporcionan los grandes libros, uno siente la necesidad de hacerse pequeño."
No me digáis que no estáis de acuerdo...
Es una novela de amor a los libros, a las cosas sencillas de la vida, a las cosas cotidianas que tantas veces nos pasan desapercibidas y que realmente son la sal y la pimienta de nuestra vida.
PRÓXIMA PARADA:
Ahora mismo y con tantas reseñas que estoy leyendo ando algo perdida y no sé muy bien qué leer, así que se admiten sugerencias.
qué ganas tengo de leer este libro, además es muy cortito y creo que me gustará
ResponEliminabesos
Se lee en nada, y más para alguien acostumbrado a leer, pero es un libro bonito para intercalar entre otros más densos.
EliminaQuiero leerlo! Se nota que lo has disfrutado. Muy buena reseña!
ResponEliminaBesotes!!!
Seguro que te gusta, es muy sencillito, se lee en una tarde, pero tiene unas reflexiones y unas ideas sobre la importancia de los libros geniales.
EliminaUn beso, y gracias!
Llevo mogollón de tiempo pensando que quiero leer esta novela y nunca de doy hueco. Todos los comentarios que he leído hacia ella son maravillosos...
ResponEliminaTe voy a sugerir que leas, si tienes lector electrónico, pretérito imperfecto, de Mercedes Pinto. Es una novela buenísima que está a punto de ser el ebook más vendido en amazon.
Abrazos
Lupa
Muchas gracias por tu sugerencia; sí que tengo lector electrónico así que me voy a buscarla de inmediato, que se me hace raro no estar leyendo nada.
EliminaUn beso!!
Yo también le tengo muchas ganas a este libro, peor como tengo tal acumulación estoy intentando aligerar la cola. Besos
ResponEliminaEste ya lo tenía apuntado con letras mayúsculas, pero lo subrayo porque se nota que lo has disfrutado mucho.
ResponEliminaBesos